Pan de espelta integral


Con teníamos ganas de probarla (por cierto el resultado es excelente), hemos utilizado harina de espelta integral, una harina con mayor contenido en carbohidratos de absorción lenta (los buenos) y algo más de contenido en proteínas, pero también podemos emplear harina de trigo integral normal.
Vamos a hacer dos panes de molde con 800 gr de harina, 500 ml de agua, una cucharadita de azucar, 42 gr de levadura fresa y una cucharadita de sal.
Calentamos el agua a 37 grados C, que este templada pero no queme, la volcamos en un bol, añadimos el azúcar y la levadura y dejamos que se disuelva. Incorporamos la harina y la sal y amasamos suavemente hasta que todos los elementos estén bien mezclados. Formamos una bola sobre la que espolvoreamos harina, cubrimos con un trapo limpio húmedo y dejamos reposar durante 45 minutos. Pasado este tiempo la masa habrá doblado su volumen.
En una superficie lisa que enharinamos volcamos la masa y la vamos amasando suavemente durante varios minutos.
Encendemos el horno a unos 200. grados y espolvoreamos con harina los dos moldes. Seguidamente dividimos la masa en dos y con cada parte rellenamos los dos moldes y los dejamos reposar tapados con el trapo, otros 40 minutos. Veremos como transcurrido este tiempo la masa vuelve a subir.
Cocemos el pan durante 30 minutos, los sacamos del horno y de los moldes. Pintamos la superficie superior de cada pan con agua y espolvoreamos con harina para así decorarlos.
Recordaros que para que el pan puede estar presente en nuestro menú diario, hay que tener en cuenta algunas consideraciones. Primero la cantidad de pan que se come en el día, segundo siempre mejor que sea integral por como pasan los azúcares a la sangre y tercero cuanto más natural, mejor. Por eso os dejamos esta receta, para que os deis cuenta de lo sencillo que resulta hacer un pan casero sin «extras».
Consulta del Dr. Luis Almagro. Cocina saludable que te ayuda a adelgazar.