Queso de yogur





Hacer queso en casa es tarea complicada, sin embargo hemos descubierto una manera de convertir el yogur en queso fresco. Si además le añadimos unas hierbas y una cucharada de aceite, obtenemos bolas de queso a las finas hierbas.
Vamos a preparar dos raciones porque la ración que nos sobra podemos conservarla durante una semana o más, en el frigorífico, dependiendo de la fecha de caducidad del yogur.
Necesitamos dos yogures desnatados, un poco de sal, un colador fino, hierbas aromáticas, pimienta y una cucharada de aceite.
Empezamos vertiendo los yogures en el colador, salpimentamos y removemos, lo cubrimos y lo dejamos escurriendo en el colador (poniendo una fuente debajo) dentro del frigorífico durante 48 horas, cuidando de quitar el agua que va soltando el yogur al menos una vez al día. Este agua la podemos utilizar posteriormente.
A los dos días, cogemos una rama de perejil, una de albahaca, un poco de cebollino y lo picamos lo mas finamente posible. Si preferimos otra clase hierbas, podemos hacer otras combinaciones, incluso con hierbas secas, orégano, tomillo, ……
Volcamos el yogur en un plato y con la ayuda de dos cucharas vamos haciendo bolas que rebozamos en la mezcla de hierbas. Una vez todas rebozadas repartimos, sobre ellas, la cucharada de aceite, que recomendamos sea de oliva virgen extra y estará listo para comer.
Debemos hacer bolas de similar tamaño y en número par, ya que la mitad es una ración.
Está muy rico como acompañamiento de una ensalada de tomate, una verdura a la plancha…
El agua (suero) que suelta el yogur podemos utilizarlo, como sustituto del agua, cuando preparamos algunas de las cremas, frías y calientes que tenemos en nuestro recetario .
El modo de introducirlo en vuestro menús es en lugar de 100 queso fresco o de dos yogures desnatados
Consulta del Dr.Luis Almagro.Marbella.Recetas saludables que te ayudan a adelgazar